Camina primero por la diabetes

Fuente: La Razón

El siglo XXI es clave en el tratamiento de la diabetes, una enfermedad que afecta ya a unos 537 millones de adultos en todo el mundo. En 2023 celebramos el centenario de la comercialización de la insulina, un momento que fue único en la historia de esta patología e hizo posible la producción a gran escala de un tratamiento que ha permitido incrementar la esperanza de vida de muchas personas con diabetes.

No podemos olvidar que hasta el descubrimiento de la insulina en 1921 de la mano de los investigadores canadienses Frederick Banting y Charles Best, la esperanza de vida de una persona con diabetes tipo 1 era inferior a tres años.

Leonard Thompson, un joven de 14 años con diabetes tipo 1, fue el primer paciente en recibir insulina en el Hospital General de Canadá (Toronto) y se coló en la historia de la medicina como la primera persona tratada con insulina y que conseguía vivir 13 años más gracias a este descubrimiento. La insulina y su posterior producción industrial, por tanto, dio a las personas con diabetes la oportunidad de tener una vida más larga y por eso constituye, hoy en día, uno de los grandes hitos de la Ciencia.

La investigación en diabetes no ha cesado, permitiendo adecuar y optimizar los tratamientos, así como ayudar a mejorar el control metabólico de las personas con diabetes. Hemos pasado de insulinas de origen animal a análogos de insulina sintetizados a través de tecnología de ADN recombinante con perfiles de acción más fisiológicos. Lo que está claro es que la innovación siempre ha ido encaminada a mejorar la calidad de vida de las personas que sufren esta enfermedad contribuyendo a hacer, en definitiva, más fácil su día a día.

La historia de la insulina es, como la de muchas otras investigaciones y descubrimientos, la de las personas dedicadas a la Ciencia que aportaron, y aportan en el presente, sus conocimientos para ayudar a mejorar la vida de millones de personas con esta enfermedad.

Por eso, hay mucho que celebrar. Y para poner en valor este hito histórico y todos los avances que se han vivido en los últimos 100 años, en Lilly, junto con la Sociedad Española de Diabetes (SED), la Sociedad Española de Endocrinología (SEEN) y Nutrición y su Área de Diabetes, la Sociedad Española de Endocrinología Pediátrica (SEEP) y la Federación Española de Diabetes (FEDE), hemos puesto en marcha la campaña Primeros por la Diabetes.

Se trata de una iniciativa que busca mostrar los avances en el abordaje presente y futuro de la diabetes, de la mano de profesionales sanitarios, pacientes, familiares, medios de comunicación, empresas sanitarias y población general. Un manifiesto de diez puntos recoge nuestro compromiso conjunto de seguir trabajando por mejorar la calidad de vida de las personas con diabetes y sus enfermedades asociadas.

Lilly lleva más de un siglo enfocada en investigar, desarrollar y producir tratamientos innovadores que permitan a las personas con diabetes mejorar sus resultados en salud y su calidad de vida.

La comunidad científica, los investigadores, los profesionales sanitarios, las personas con diabetes y sus familiares anhelan el que un día se pueda curar la diabetes. Mientras tanto, nos seguiremos esforzando por mejorar la integración de la tecnología en diabetes y continuar investigando sobre esta patología intentado desarrollar soluciones, que permitan mejorar el abordaje la diabetes y sus comorbilidades de manera integral.

La diabetes se enfrenta actualmente a importantes desafíos que solo pueden abordarse mediante el trabajo conjunto de todos los agentes implicados. Por eso, «Primeros por la diabetes» suma el apoyo de sociedades científicas, asociaciones de pacientes, fundaciones y federaciones, agrupaciones de periodistas, etc.

Todo el que lo desee puede sumarse a esta campaña para seguir trabajando por un futuro mejor para las personas con diabetes. Te animo a que visites la página web www.primerosporladiabetes.com para celebrar todos los hitos conseguidos en la diabetes en los últimos cien años y seguir avanzando para mejorar la calidad de vida de aquellas personas que sufren esta enfermedad.