¿Afecta igual la diabetes tipo 2 a hombres y a mujeres? ¿Cuáles son las diferencias?
La detección de la diabetes tipo 2 en mujeres es más tardía, lo que provoca que presente más comorbilidades y la evolución de las complicaciones sea peor con respecto al hombre.
Fuente: El Periódico
Casi 6 millones de personas en España padecen diabetes tipo 2. Una patología que afecta tanto a hombres como a mujeres, pero que tiene distintas implicaciones y desarrollo en función del sexo del paciente.
Son varias las diferencias entre hombres y mujeres cuando hablamos de diabetes tipo 2. Así las explica la doctora Mª Dolores García de Lucas, del servicio de Medicina Interna del Hospital Costa del Sol (Málaga).
- La primera es que, en ellas, el diagnóstico de esta enfermedad crónica es más tardío que en ellos. Este hecho se debe a múltiples razones como que “prioriza el rol de cuidadora, lo que hace que retrase su asistencia al médico”, .
- Pero no es el único factor diferencial. La doctora Ana Isabel Jiménez Milán del servicio de Endocrinología en el Hospital Universitario Puerto Real (Cádiz) añade que, “las mujeres precisan de un mayor tiempo de insulinoresistencia y un mayor grado de obesidad para el desarrollo de la diabetes”.
- Y, como comenta la doctora García de Lucas, “en mujeres sucede que los médicos ponen objetivos menos ambiciosos en controlar la enfermedad y tratan con menos intensidad los factores de riesgo vascular” derivados de la diabetes.
- A esto se une que, una vez detectada la diabetes en la mujer, su presentación, evolución y aparición de complicaciones, diferentes a las de los hombres, siguen siendo un hecho poco conocido por parte de la comunidad científica.
No obstante, “pese a que hay datos que lo describen con la suficiente fiabilidad, no siempre se ha ponderado el impacto que tiene este hecho diferencial a la hora de tratar a una mujer o a un hombre con diabetes tipo 2”, afirma la doctora Jiménez Milán.
DIABETES TIPO 2 EN MUJERES: ASPECTOS DIFERENCIALES
La prevalencia de la diabetes tipo 2 en las mujeres es de un 8.6%.
Además de los factores sociales que retrasan el diagnóstico de la diabetes tipo 2 en la mujer, hay también patologías específicas de la mujer que determinan un mayor riesgo de desarrollo de diabetes tipo 2 como el síndrome de ovario poliquístico y las complicaciones gestacionales.
Por ejemplo, como afirma la doctora García de Lucas:
- "La diabetes gestacional condiciona el desarrollo posterior de diabetes tipo 2 hasta en un 19% de los casos, y supone doblar el riesgo de presentar una enfermedad cardiovascular”.
Además, “las enfermedades inflamatorias y los trastornos del ánimo, tipo ansiedad y depresión, deben ponernos en sobre aviso, pues también debemos tener en cuenta estos considerados factores de riesgo “no clásicos” o emergentes”, según la doctora Jiménez Milán.
De este modo, cada etapa de la vida de la mujer supone un reto a la hora de detectar o tratar la diabetes tipo 2, porque existen factores propios de la condición femenina, como es el perfil hormonal, que repercuten sobre el desarrollo y el control de la diabetes y la salud cardiovascular.
Como detalla la doctora García de Lucas:
- "En la adolescencia se presentan los trastornos de la alimentación, la regla o el ovario poliquístico.
- Más tarde, en la juventud puede llegar la maternidad que puede venir acompañada de diabetes gestacional
- Y por último, en la madurez, la menopausia y sus cambios metabólicos”.
Esto motiva, como alega la doctora Jiménez Milán, que “a la hora de tratar a la paciente comorbilidades como la hipertensión o la dislipidemia, sobre todo durante la premenopausia, sean minimizadas y no consideradas en el contexto de una diabetes en curso o en una situación de prediabetes”.
A pesar de estas señales que predisponen a la mujer a padecer diabetes tipo 2, “la detección tardía de la diabetes tipo 2 en la mujer es un hecho lo que explica que, una vez que aparece la diabetes tipo 2, la tasa de complicaciones sea mayor y la evolución presente más comorbilidades”, incide la doctora Jiménez Milán.
La especialista añade, además, que, “entre estas complicaciones, la mujer tiene más riesgo de desarrollar una complicación cardiovascular e insuficiencia cardíaca que presentan una serie de particularidades que no siempre se evalúan de manera adecuada, lo que se traduce en una peor evolución”.
Y, como puntualiza la doctora García de Lucas, “tras la menopausia, las complicaciones vasculares, el ictus o la enfermedad arterial periférica, son más frecuentes y graves que en sus homólogos varones”.
LA IMPORTANCIA DE LA DIVULGACIÓN
En definitiva, las mujeres presentan un perfil diferente en el desarrollo y las complicaciones de la diabetes tipo 2, de ahí que “sea necesario planificar y entender con perspectiva de género esta enfermedad lo que redundará en una mejor prevención, tratamiento y atención diferenciada”, afirma la doctora García de Lucas.
Por eso, uno de los principales retos en el manejo de esta patología en las mujeres está más allá de la atención sanitaria, es decir, está en el fomento del conocimiento que existe sobre la presentación clínica de la diabetes tipo 2, su pronóstico, la respuesta farmacológica y las barreras sociales en las mujeres.
“La concienciación y formación específica de los equipos sanitarios es clave para mejorar el manejo de las pacientes mujeres”, añade la doctora Jiménez Milán. Precisamente, ambas expertas coinciden en que “es imprescindible a nivel institucional la puesta en marcha de campañas específicas para promover el autocuidado de las pacientes, con un enfoque personalizado de los análisis epidemiológicos y de los estudios de intervención en salud para hombres y mujeres. Y, para esto, es necesario que la comunidad científica incorpore vías de investigación que marquen líneas de intervención diagnóstica y terapéutica específicas en las mujeres con diabetes”.